lunes, 12 de marzo de 2012

¡¡¡Que me estais pidiendo!!!

Estábamos en casa de mis padres, saliendo ya para volver a casa. Iba mi hijo mayor con un llavero en una mano y una motito del tamaño de su dedo meñique en la otra. Para el que no lo sepa, el angelito tiene tres años y medio. Conversión entre mi chico y mi hijo mayor:

   Padre: ¿Quieres llevar la maleta?

   Hijo: Papa, ¿Cuantas manos tengo?

    Padre, con cara de asombro: Pues dos, hijo, dos

    Hijo: ¿y no ves que las tengo ocupadas?, papa, no puedo llevar la maleta ...

La que nos espera . . .

martes, 6 de marzo de 2012

Momentos

Ya llevamos casi siete meses de lactancia, y nunca pude imaginar que fuera así. Siempre me ha encantado ver como buscaba la teta, como se enganchaba y sentir esa sensación de cosquilleo mientras mamaba. Verle como se quedaba dormido en mis brazos. Sentir todo eso me daba una paz y una alegría que es difícil de explicar a quien no lo ha vivido.

Escribo esto, porque esta mañana, cuando le daba el pecho al peque, se me ha quedado dormido y me he quedado un rato mirándole. Y pensaba que esos momentos, cada vez eran menos. Porque tiene que ser así. El  niño hace menos tomas y toma ya otros alimentos.

El mayor problema que me he encontrado durante esos meses con la lactancia, es sentirme en cierto modo un tanto incomprendida. Y no por la gente de la calle, o por conocidos, si no por gente a la que quiero. Gente con la que me hubiese gustado compartir esto, tal como lo siento, pero que al tener cierto rechazo no ha sido posible. Se que tienen sus razones, y si, a veces, en parte, han sido culpa mía, por no saber expresarlo o explicarlo.

lunes, 5 de marzo de 2012

Miedo

El otro día me encontré con una conocida, y empezamos la típica conversación. Le pregunte por su peque, ella por los mios, me pregunto si había vuelto a trabajar y le dije que si. Una cosa llevo a la otra y de repente me dice que se había tenido que ir de viaje a sudamerica por trabajo una semana entera, y que lo pasaba mal en el avión desde que tuvo a su hijo, porque tenia verdadero terror de que pasara algo durante el vuelo.

Y es cierto, nunca he pensado tan a menudo en que nos pudiese pasar algo a mi o a mi marido. Antes ni siquiera pensaba en ello, pero desde que tengo a mis hijos se ha convertido en una posibilidad aterradora. No veríamos crecer a nuestros hijos, y lo mas importante, ellos no nos tendrían a nosotros. Si, se quedarian con nuestra familia, pero no serian sus padres ... un niño necesita a sus padres.

Solo hay otra cosa que me da más miedo, que le pase algo a mis hijos.